27.1.25

Haz siempre lo máximo que puedas, respetando tus propios límites y posibilidades

EL PRINCIPIO DE INERCIA                 

Las Leyes de Newton son tres principios básicos que describen de manera sencilla el movimiento de cualquier cuerpo físico. Valen tanto para enormes planetas como para los pequeños objetos con los que interactuamos habitualmente. Y si bien están redactadas con precisión científica, resultan bastante intuitivas porque concuerdan con nuestras experiencias y observaciones de cada día.

El principio de inercia es la primera de estas tres leyes y establece que cualquier objeto tiende a permanecer en el estado de movimiento en que se encuentra. Si está en reposo, tiende a permanecer en reposo. Y si se está moviendo, tiende a permanecer en movimiento. Por eso es necesario realizar un cierto esfuerzo para mover algo que está quieto, o para detenerlo si es que se está moviendo.

20.1.25

Lla búsqueda de la felicidad afuera siempre estuvo a mano en nuestro interior

LA FELICIDAD, AQUÍ Y AHORA            

Todos podemos alcanzar la felicidad plena, aquí y ahora. Aunque resulte muy difícil hacer de esta idea una experiencia real y permanente, maestros de distintas tradiciones la expresaron de diferentes maneras, en todas las épocas.

En cada momento de nuestras vidas, en cada circunstancia, casi sin excepciones, existen los suficientes elementos maravillosos como para colmarnos de dicha, de felicidad plena. Pero en lugar de asombrarnos y de disfrutar de lo que cada instante nos ofrece, damos por hecho esos pequeños milagros, los consideramos ordinarios, naturales y cotidianos, y, en cambio, destacamos y nos concentramos en eso de lo que el momento carece.

13.1.25

El equilibrio entre estas dimensiones edifica el sustrato del bienestar humano

LAS OCHO DIMENSIONES DEL SER HUMANO    

Cuando comprendes, cuidas y promueves cada área que te define, como la espiritual, la ético-moral y la cognitiva, aumentas tu potencial para lograr objetivos y trabajas en tu bienestar.

Pocas cuestiones son más complejas y apasionantes que entender cómo somos los seres humanos. Podemos, sin duda, echar mano de la clásica definición dualista para visualizarnos como una entidad formada por un cuerpo y una mente. Sin embargo, las personas somos mucho más que un envoltorio físico y un cerebro que procesa la realidad que le envuelve.

Lo cierto es que cada uno de nosotros somos lo que sentimos, lo que pensamos y hasta aquello en lo que creemos. Nos define nuestra historia pasada e incluso la cultura que nos contiene. Asimismo, cada una de estas esferas se relacionan entre sí para mediar en tu bienestar o en tu infelicidad. Comprenderlas y trabajarlas te permitirá promover tu plenitud.

6.1.25

Atraemos tanto lo bueno como lo malo, de acuerdo a cómo sean nuestras emociones

LA MEJOR ACTITUD                                

La Ley de Atracción podría resumirse así: Somos creadores de nuestra realidad, somos ciento por ciento responsables de todo lo que nos pasa y atraemos a nuestras vidas el tipo de experiencias y de relaciones que mejor se ajustan a las emociones que experimentamos con más frecuencia.

Nada dice la Ley de Atracción acerca de trabajar duro para tener un futuro mejor. Sólo nos anticipa que nuestra realidad futura, la que estamos creando ahora, reflejará fielmente nuestro estado emocional actual. Si esto es cierto, la mejor actitud para crear la realidad que anhelamos podría ser la que sugiere esta imagen.

Pero, ¿cómo podría alguien alcanzar cualquier meta si adopta una actitud tan pasiva, tan despreocupada? ¿Quién resolvería cada problema, quién llevaría a cabo los cambios necesarios, quién se encargaría del trabajo duro?