CONCIERTO PARA EL ALMA
EL CAMINO DE LA ESPIRITUALIDAD
¿Cuál es tu vocación? ¿Qué viniste a hacer a la tierra? ¿Estás siendo fiel a tu alma?
"Todas las
personas al comienzo de su juventud saben cuál es su leyenda personal. En ese
momento de la vida todo está claro, todo es posible y no tienen miedo de soñar.
No obstante, a medida que el tiempo va pasando, una misteriosa fuerza trata de
convencerlas de que es imposible realizar esa leyenda personal". P. Coelho
¿Qué es lo que nos sucede, cuando a pesar del hecho de que tengamos "todo lo que deseamos" léase salud, familia, dinero, trabajo, etc., sin embargo, generalmente no logramos sentirnos en paz? ¿Por qué pareciera que siempre nos falta algo?
La respuesta a esta
milenaria pregunta puede abordarse desde diversos puntos de vista. He elegido
desarrollar el punto de vista relacionado con la vocación personal. Entiendo
que la insatisfacción a la cual me refiero, está relacionada con el hecho de que
la mayoría de las veces nos abocamos a tareas diametralmente opuestas a las que
desearía realizar nuestra alma. De manera tal que dejándonos influenciar por
circunstancias y voces externas, terminamos siendo y haciendo algo muy alejado
a lo que, en lo más íntimo, quisiéramos ser y hacer. Como lógica consecuencia,
no logramos satisfacer a los demás ni a nosotros mismos.
Es maravilloso
aprender a disfrutar de cada minuto, haciendo lo que más nos apasione, que es
precisamente aquello que vinimos a hacer.
Podremos percibir
inequívocamente cuando damos en la tecla, porque al realizar nuestra precisa
tarea nos sentimos exactamente como si estuviéramos enamorados, pero en vez de
estar enamorados de una persona, lo estamos de nuestra misión, de nuestra
vocación; ella se
transforma en algo que nos incentiva grandemente, que nos produce profundo
bienestar, se convierte en fuente inagotable de pensamientos; es algo que
deseamos desarrollar por encima del resto de nuestras actividades, con
contagioso entusiasmo, seguros de que es "eso" particularmente "eso";
una actividad que le da un sentido especial a nuestra vida.
Luego de reflexionar
profundamente, ojalá estemos siempre bien dispuestos y con el suficiente valor
para poder realizar los cambios pertinentes que entendamos es necesario
realizar para reajustar el rumbo de nuestra vida. Ojalá nos queramos lo
suficiente para darnos cuenta de que merecemos ser felices aquí y ahora, para
lo cual es fundamental que podamos ser sumamente generosos con nosotros mismos.
Si vivimos haciendo algo que no tenemos ganas de hacer, algo con lo cual no nos
identificamos corazón adentro, estaremos cabizbajos y meditabundos y eso será
lo que contagiaremos a los que nos rodean, y esa será también nuestra cosecha. Ya
hay a nuestro alrededor demasiado campo sembrado de hastío. Aportemos algo
diferente.
El hacer
refleja nuestra conciencia del ser… Cuando lo que buscamos es ser, las
acciones correctas son inevitables. La felicidad sigue a las acciones
correctas.
Lo primero que
tenemos que averiguar antes de definir conscientemente para qué estamos sobre
este maravilloso planeta, dentro de un cuerpo físico, es: saber quiénes somos. Es
necesario que nos preguntemos a nosotros mismos: ¿quién soy yo en el
fondo? ¿quién soy yo, más allá de todas las etiquetas coyunturales que adornan
mi alma?
Investigar sobre
este pequeño gran detalle nos puede llevar libros enteros que quizás podamos
empezar a compartir en próximas instancias. No obstante, me parece un elemento
muy importante a tener en cuenta a la hora de poder definir nuestras acciones.
¿Estamos buscando el
ser o mediocremente nos conformamos cultivando el parecer? ¿Cuánto tiempo dedicamos cotidianamente a
contactarnos con lo que realmente somos? La raíz de la cosa está en poder descubrir
cuál es nuestra verdadera identidad, entonces estaremos en condiciones de
dar adecuada direccionalidad a nuestra vida.
El secreto de la
existencia no consiste solamente en vivir, sino en saber por qué vivimos. ¿Cuál
es el propósito de nuestra vida? ¿Sabemos realmente para qué estamos encarnados en un cuerpo, en el aquí y
el ahora tan hermosamente disponibles a nuestros pies? ¿Qué es lo que más
deseamos alcanzar en nuestra vida? ¿Sabemos que existe algo llamado perfección
y que habita en nuestro interior?
Hasta que no
definamos claramente estas cuestiones, será difícil que entendamos para qué
hacemos lo que hacemos. Conforme sean nuestras respuestas, será nuestro
accionar.
Una de nuestras
principales tareas en este alucinante proceso de autoconocimiento por el que
todos tenemos que transitar mientras estemos respirando, es aprender a
liberarnos de los condicionamientos humanos para despertar la condición humana,
la cual es sagrada.
La humanidad vive
despertando. Como consecuencia de ello, paulatinamente, casi sin que nos demos
cuenta, la vida de todos camina hacia lo sagrado. Naturalmente esto va abriendo
nuestros ojos, nos va preparando para convertirnos en creadores de una nueva
humanidad, en la cual ya no es suficiente tener casa, auto, buen trabajo y
vacaciones una vez al año, ya no interesa luchar en contra de un sistema que se
está cayendo solo.
Estamos aprendiendo
a percibir nuevos horizontes...
Sogyal Rimpoché, en
su Libro tibetano de la vida y de la muerte nos dice al respecto: "la sociedad moderna me parece una
celebración de todas las cosas que alejan de la verdad, que hacen difícil vivir
para la verdad y que inducen a la gente a dudar incluso de su existencia. Y
pensar que todo esto surge de una civilización que dice adorar la vida, pero en
realidad la priva de todo sentido real; que habla sin cesar de "hacer
feliz" a la gente, pero que de hecho obstruye su camino a la fuente de la
auténtica alegría".
La auténtica alegría
se encuentra en aprender a ser fieles a nuestra naturaleza y no a un sistema
falso que nos conduce directamente al sufrimiento y a la enfermedad". A
buen entendedor, pocas palabras...
La semilla de la
espiritualidad brilla en cada uno de nosotros.
El camino es nuestra
escuela y cada paso la lección a aprender.
No hay misión más
noble que el ser útil a los demás.
El camino de la
espiritualidad está en caminar junto aquellos que más necesitan ayuda.
El camino de la
espiritualidad está en no juzgar a nadie y dar, sin esperar nada a cambio.
En definitiva, el camino de la espiritualidad… es el camino de tu
propio corazón.
https://lacienciadelespiritu.blogspot.com/2023/12/concierto-para-el-alma-el-camino-de-la.html
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