Necesito bailar con la vida sin más música que mi música. Necesito no necesitar

DEJAR DE PENSAR Y EMPEZAR A VIVIR

Quiero creer que todo tiene un sentido. Que lo que ahora es un dolor profundo en el pecho mañana será una pieza más del rompecabezas de mi vida que me llevará a comprenderla y a vivirla con más intensidad y mayor calma.

Que el miedo sentido de forma consciente dejando de huir me hace más elástica y más valiente. Que esta noche tan oscura que atravieso me llevará a una claridad inmensa que me dará paz.

Quiero pensar que cada decepción es una experiencia más que me entrena para dejar de decepcionarme a mí misma y ponerme en primera fila de mi vida después de años poniendo a otras personas y a muchas obligaciones…

Y así dejar de perderme a mí para evitar perder a otras personas que ya están perdidas antes de empezar nuestra aventura compartida. Así puedo perdonar y volver a empezar de nuevo con otra mirada y sin expectativas.

Quiero creer…

Que cada traición me conduce a la confianza…
Que cada injusticia sentida me lleva al equilibrio…
Quiero pensar que la incertidumbre me lleva a la fe en mí y en la vida.
Quiero creer que cada rechazo que he vivido me permite reconocer más mi valor y dejar de rechazarme a mí misma una y otra vez…

Que me caigo porque necesito caer. Aunque caer es terrible y agotador.

Que mis lágrimas curan una tristeza acumulada que necesitaba soltar.

Que todos estos pensamientos tristes y oscuros que sobrevuelan mi mente se calmarán cuando consiga darme cuenta de que la que los piensa soy yo y no ellos a mí.

Quiero imaginar que esta cuesta agreste e inclinada por la que trepo día tras día tiene momentos llanos para recobrar la calma y el aliento.

Que todo el amor que he dado y otros no han querido recibir no se fue por el desagüe de la vida sino que está acumulado en algún lugar esperando volver y ser compartido.

Porque necesito que este dolor sea la antesala de algo tan hermoso que cuando llegue todo lo que ha existido antes se desvanezca.

Quiero pensar que los golpes son lecciones y los desengaños el preludio de otra vida más libre y menos limitada… Una vida en la que ya no esperas nada y todo lo que llega es un maravilloso regalo.

Y no, no es que me tenga que gustar lo que me ha dolido y lo terrible que he encontrado por el camino, no es que quiera repetir, es que no pude o no supe evitarlo y decido usarlo (ya que pasó) para quererme y comprenderme más.

Necesito salir de mí y soltar el peso imaginario de una rigidez absurda, de la idea loca de que va a pasar algo que me arreglará la vida y me dará la alegría que yo reprimo porque todavía no me siento digna… Necesito dejar de verme en la meta y empezar a verme sentada en el camino mirando al mar y respirando sin esperar nada… Necesito dejar de pensar y empezar a vivir…

Quiero dejar de soñar y empezar a tocar más, a sentir más, a acariciar, a estar, a ensuciarme con la vida, a arrugarme la ropa, a despeinarme, a romper los zapatos de tanto caminar… A bailar, a quedarme ronca de tanto cantar y que me salgan arrugas de tanto reír… Que se me pase la hora de tanto disfrutar. Y no, no importa que la carroza sea una calabaza porque yo nunca he sido una princesa.

Y descubrir que todo lo que he vivido, aunque duela, tiene sentido. Que mis lágrimas curan una tristeza acumulada que necesitaba soltar.

Quiero convencerme de que hice todo lo posible para llegar a donde quería llegar y acariciar lo que quería acariciar, pero que si no lo conseguí es porque no todo depende de mí. A veces por más que hagas y te acerques a lo que deseas no sucede el milagro y lo que anhelas se escapa de tu lado para que aprendas a estar sin ello, al menos por un tiempo.

Necesito saber ahora que todo esto me lleva a amarme más, a sentirme mejor en mi piel y a encontrar ese rellano en esta escalera que subo y que tanto cansa para poder apaciguar mi alma.

Quiero confiar. Necesito confiar… Necesito dejar de esperar que algo suceda para que la vida me plazca. Necesito amar sin esperar amor. Necesito tener la fe de los que saben que es cierto pero todavía no lo tocan. Necesito vivir lejos de mis pensamientos absurdos para mirarlos sin vivir en ellos.

Necesito bailar con la vida sin más música que mi música. Necesito no necesitar.

Mercè Roura

https://mercerou.wordpress.com/2023/06/12/dejar-de-pensar-y-empezar-a-vivir/