EL DISCERNIMIENTO
UNA GUÍA ÉTICA CONTRA LA CONFUSIÓN
Estamos perdiendo la batalla de la libertad interior en
manos de la desidia, el desencanto y la confusión. Por eso es urgente entrenar
la capacidad de discernir, a fin de evitar que nos manejen a su antojo quienes
solo nos ven como sumisos consumidores
Dice el filósofo José Antonio Marina que la juventud está intoxicada de
comodidad y pantallas: “La libertad viene de la capacidad de autonomía, de
la capacidad de pensar por tu cuenta, de tomar decisiones, no de delegar las
decisiones o los razonamientos al sistema o a los influencers” (1).
Jóvenes o mayores, quienes tratan de mantener el pensamiento claro y sereno para lograr una mayor conciencia y calidad humana, no lo tienen fácil.