28.6.13

No me interesa lo que haces para ganarte la vida. Quiero saber lo que ansías, y si te atreves a soñar con lo que tu corazón anhela.

LA INVITACIÓN

No me interesa lo que haces para ganarte la vida. Quiero
saber lo que ansías, y si te atreves a soñar con lo que tu
corazón anhela.
No me interesa tu edad. Quiero saber si te arriesgarías a parecer un tonto por amor, por tus sueños, por la aventura de estar vivo.
No me interesa qué planetas están en cuadratura con tu Luna. Quiero saber si has llegado al centro de tu propia tristeza, si las traiciones de la vida te han abierto o si te has marchitado y cerrado por miedo a nuevos dolores. 
Quiero saber si puedes vivir con el dolor, con el mío o el tuyo, sin tratar de disimularlo ni de remediarlo.
Quiero saber si puedes experimentar con plenitud la alegría, la mía o la tuya, si puedes bailar con frenesí y dejar que el éxtasis te penetre hasta la punta de los dedos de los pies y las manos sin que tu prudencia nos llame a ser cuidadosos, realistas, a recordar las limitaciones propias de nuestra condición humana.
No me interesa saber si lo que me cuentas es cierto. Quiero saber si puedes decepcionar a otra persona para ser fiel a ti mismo; si podrías soportar la acusación de traición y no traicionar a tu propia alma…
Quiero saber si puedes ver la belleza, aun cuando no sea agradable, cada día, y si puedes hacer que tu propia vida surja de su presencia.
Quiero saber si puedes vivir con el fracaso, el tuyo y el mío, y de pie en la orilla del lago gritarle a la plateada forma de la luna llena: “Sí!”.
No me interesa saber dónde vives, ni cuánto dinero tienes. Quiero saber si puedes levantarte después de una noche de aflicción y desesperanza, agotado y magullado hasta los huesos, y hacer lo que sea necesario para alimentar a tus hijos.
No me interesa saber a quién conoces ni cómo llegaste hasta aquí. Quiero saber si te quedarás en el centro del fuego conmigo y no lo rehuirás.

25.6.13

Atentos y conscientes de lo que pasa a nuestro alrededor, con lo que nos regala la vida a cada instante!

EL DÍA DESPUÉS…

El solsticio de verano o la verbena de Sant Joan -que a los efectos es lo mismo, con un decalage de un par de días, para no confundir lo pagano con lo religioso- celebra el final de lo viejo e inservible, quemando en la hoguera los enseres inútiles de los hogares. Los fuegos artificiales no son más que la metáfora china del fuego, pues ellos inventaron la pólvora y supieron exportarla, como hacen aún ahora con todo lo que fabrican. Muchedumbres alrededor de la hoguera, petardos con sonido ensordecedor y luces multicolores, comida opípara, alcohol a raudales, risas y, por qué no, un cierto descontrol verbenero y de “felicidad” obligada…

Pero ya en las civilizaciones más arcaicas -pioneros en la fiesta del sol y del fuego- se consideraba igualmente importante el inicio del nuevo día, tras la ajetreada noche. Y es que después de quemar lo antiguo e inservible en nuestra vida en la hoguera, el sol trae un nuevo y reluciente día a nuestra vida, ya vacía de lastres del pasado. Vaciar para luego poder llenar! Y un nuevo sol llega a nuestra vida… en la que todo está por hacer!

Seguramente este nuevo día no sea muy distinto a los anteriores! O sí… si dormiste poco, si bebiste, comiste o fumaste demasiado! Shhhhhh ya sé, ya sé… cualquier sonido te rebota en la cabeza tras la fiesta, hay quien le llama resaca!
Pero más allá de cómo te hayas despertado, hoy es un nuevo día, vacío y por llenar, que representa lo que es tu vida, cada día! Y desde siempre la llegada del nuevo sol en el solsticio representaba esa vida sin lastres del pasado y con una nueva luz, que te debe iluminar, cada día. Esa luz que nace dentro de ti, donde está ese sol del amanecer llega para recordarte que lo que hay dentro está también fuera!

En Tulúm (México) y en algunos restos arquitectónicos más en otros países, atinaban para que exactamente a las 6 horas de una mañana como ésta el sol pasara a través de una pequeña ventana (de no más de unos centímetros) iluminando algo, como una roca simbólica o una figura estratégicamente dispuesta detrás, a varios metros de distancia! No era un día cualquiera! En la vida humana todo tiene su sentido y su correcto momento y lugar, aunque a veces nos cueste creerlo y/o aceptarlo!

20.6.13

Derrochamos cada segundo que llega a nuestra vida y ésta, de vez en cuando, nos cuestiona el tiempo que perdemos intentando hacer solo lo que toca…

SOLO TIEMPO, AL FIN Y AL CABO

Empieza una nueva semana! ¿Una más, en tu vida? ¿La última? ¿La primera? Seguramente, como yo mismo, ni lo sabes. Quizás ni te preocupa. ¿Qué es una semana, al fin y al cabo? Son 7 días a los que alguien llamó “semana”, como podían ser 5, 6, 8 o quizás 10. El tiempo es lo que es, aunque el ser humano le haya puesto nombre y medida, porque la mente necesita mesurar todo para darle sentido y valor…

Pero, con el paso del tiempo, uno aprende que el tiempo no es más que eso, tiempo. Tiempo pasado o futuro, de lo que pasó o aún está por llegar, aunque quizás nunca llegue. Tiempo perdido o ganado, tiempo invertido o desperdiciado, ¿quién sabe? Porque solo el tiempo da valor al tiempo en que vivimos y al momento que tenemos el privilegio de vivir, ahora! No hay más, es todo lo que tenemos y, a la vez -vaya paradoja- lo que más nos falta en nuestra vida, cada día. Pero el día en que te encuentras con el sentido de tu vida, ves que el tiempo y el espacio no importan tanto. Lo que piensas y sientes a cada instante está siempre aquí, contigo. Y eso es lo realmente importante!

Pero demasiadas veces utilizamos el tiempo en contra nuestra, como la distancia. Le otorgamos a la edad, a cada momento y lugar, a cada día que pasa, el poder de dirigir nuestra vida y actuamos en consecuencia, como si cada momento, lugar, edad y día que pasa tuviera que ser de una determinada forma! Si lo piensas bien, siempre te ha atado el tiempo en su paso irremediable y monótono. El nacimiento, la infancia, la adolescencia, la mayoría de edad, la madurez, la vejez, que convertimos en metas volantes de nuestras vidas, como en una carrera ciclista. Y, mientras, derrochamos cada segundo que llega a nuestra vida. Hasta que ésta, de vez en cuando nos hace una broma y nos cuestiona el tiempo que perdimos y perdemos intentando hacer solo lo que toca…

18.6.13

Hay diferentes alternativas al único modelo de vida que hemos conocido

DESENREDAR LA VIDA

Muchas veces nuestra situación de vida presente parece condicionarnos completamente. Asumimos en el pasado diferentes responsabilidades que ahora limitan nuestras posibilidades de actuar con libertad. Y es probable que hayamos adoptado, tal vez de manera inconsciente, ciertos modelos o estereotipos de lo que debemos ser o hacer, y no nos resulte fácil recuperar nuestra propia independencia.

Si este es el caso, podemos considerar que nuestras obligaciones, responsabilidades y compromisos se parecen un poco a un “enredo”, como el de la imagen. Al principio puede parecernos muy difícil resolver nuestro propio enredo personal y esto tal vez nos desanime y nos haga postergar tomar las decisiones que nos vayan liberando. Pero normalmente podemos deshacer cualquier enredo, por más intrincado que sea, si nos tomamos el trabajo de ir “desanudando” una por una cada situación que actualmente pueda estar limitándonos.
El primer paso es tomar consciencia de que nuestra condición actual es, en gran medida, consecuencia de diferentes decisiones que fuimos tomando en el pasado. Y que podemos tomar nuevas decisiones que nos vayan devolviendo la libertad.

Vocación vs. obligaciones
A veces puede parecernos difícil ser fieles a nuestra vocación… o hasta nos cueste descubrirla. Es que a lo largo de todo el proceso de nuestra educación nos dicen “NO” a casi todo lo que espontáneamente nos gusta y nos obligan a concentrarnos en diferentes actividades que son más bien aburridas, y esto no favorece precisamente el descubrimiento de nuestra propia vocación. Además, la sociedad nos condiciona para que nos resulte difícil apartarnos del camino que ya tiene trazado para nosotros, un camino que normalmente no contempla nuestros gustos y preferencias.

Este video es muy estimulante y su mensaje acerca de la vocación es simple y claro:
Si el Dinero no Importara, ¿qué harías?, por Alan Watts.
En el video, Alan Watts parece dirigir su mensaje a las personas jóvenes, que aún no han tomado las decisiones más importantes, esas que determinarán en gran medida la trayectoria general de sus vidas. Sin embargo siento que cualquiera sea nuestra edad y la situación en la que nos encontremos, siempre podemos permitirnos, en alguna medida, hacer aquellas cosas que más nos gustan.

14.6.13

La vida nos manda señales, indicios de que mañana se va, por eso...

OPORTUNIDADES

Realmente la vida no 
da segundas oportunidades,
si aún puedes hacerlo es porque
tu oportunidad aún no pasó.

No digas nunca,
ni siempre,
no quieras borrar el pasado,
ni prometer un futuro,
pues lo único que tienes
es esto...

La vida nos manda señales,
indicios de que mañana se va,
por eso no guardes un te quiero,
un abrazo, un gesto,
un sentimiento...

10.6.13

Debería haber arriesgado más y hasta errado más, haber hecho lo que quería hacer...

(Versión en castellano al final)

 Devia ter amado mais
Ter chorado mais
Ter visto o sol nascer

Devia ter arriscado mais e até errado mais
Ter feito o que eu queria fazer
Queria ter aceitado as pessoas como elas são
Cada um sabe a alegria e a dor que traz no coração

O acaso vai me proteger
Enquanto eu andar distraído
O acaso vai me proteger
Enquanto eu andar...


Devia ter complicado menos, trabalhado menos
Ter visto o sol se pôr
Devia ter me importado menos com problemas pequenos
Ter morrido de amor
Queria ter aceitado a vida como ela é
A cada um cabe alegrias e a tristeza que vier


O acaso vai me proteger
Enquanto eu andar distraído
O acaso vai me proteger
Enquanto eu andar...

7.6.13

El amor es esa fuerza tan grande que es capaz de hacerte invencible, o lo más frágil del mundo.


QUE SERÁ

Hoy es uno de esos días
en que quieres cambiar el mundo,
te vas al diccionario, y buscando lees

Amor: Sentimiento intenso del ser humano que,
partiendo de su propia insuficiencia,
necesita y busca el encuentro
y unión con otro ser.

Y ya está? NO

Luego abres tu correo de gmail,
buscas la editorial,
y le escribes un correo,
así,
porque tu sabes que
se han equivocado,
y que el amor es mucho más.

El amor es cuando
al ver a una persona sientes
que se para el tiempo,
sientes que se te dispara el corazón
a mil por hora,
se te dilatan las pupilas
y se entrecorta la respiración.

El amor es cuando te despiertas
a su lado y la miras
como la primera vez,
y si adviertes que se despierta
te haces el dormido,
pues no quieres moverte de la cama en todo
el día ya que ahí esta todo lo que necesitas.

5.6.13

Si estamos “defendiendo” una interpretación de la realidad que no nos favorece, lo mejor es replantearnos qué es lo que queremos: ¿tener razón o ser felices?

TENER RAZÓN O SER FELICES

Todo tipo de personas visitan este blog. En general los visitantes tienen afinidad con las ideas que aquí se difunden, pero a veces recibo mensajes de personas que piensan diferente, que me escriben oponiendo a lo que leen en estos artículos una visión escéptica y pesimista de la realidad. Esos mensajes suelen decir que la vida es dura y difícil, que la felicidad es inalcanzable, que las personas son egoístas, que Dios no se interesa por nosotros o que simplemente no existe.

Entiendo ese punto de vista. Es una descripción válida de la realidad y de la vida. Y quienes la adoptan y sostienen encuentran efectivamente todo tipo de confirmaciones de que están en lo cierto, de que el mundo es exactamente así. Literalmente “tienen razón”, aunque la validez de sus conclusiones se limita sólo a su realidad personal, compartida por quienes piensan de la misma manera.

Los escépticos podrán decir que la Ley de Atracción realmente no funciona. ¿Y qué hacen entonces? Encuentran evidencia que lo demuestra y encuentran a otros que están de acuerdo con ellos. Pero lo que en verdad están haciendo es confirmar la Ley de Atracción aún sin saberlo. La gente que está en desacuerdo con la Ley de Atracción se atrae entre sí, del mismo modo que la gente que sí está de acuerdo. (Joe Vitale)

El siguiente vídeo muestra de una manera muy divertida que cuando se insiste en difundir una visión negativa de las cosas, con frecuencia la realidad parece confirmar esos pronósticos tan pesimistas:
VISUALIZAR EL VIDEO

Nadie puede discutir que los cocodrilos realmente existen. La idea no es negar lo evidente, sino elegir concentrarse en otros aspectos más positivos de la realidad, aquellos que hacen que la vida sea más fácil y agradable. En vez de debatir acerca de cocodrilos, estos dos animalitos simplemente podrían haberse alejado hasta un lugar seguro y ocuparse de otros asuntos más agradables.

4.6.13

Sonreír es mucho más fácil y, por supuesto más sano, que enfadarse.


ANTES Y AHORA

Antes no me gustaba que me tomasen el pelo.
Ahora, me da igual: apenas tengo pelo.

Antes siempre tenía que encontrar al responsable de cualquier cosa que me parecía que estaba mal hecha.
Ahora, ya no lo busco.

Antes me enfadaba por demasiadas cosas.
Ahora, quizás me tomo demasiadas cosas a broma.

Antes, si prometía algo, me desvivía por cumplirlo.
Ahora ya, pido más veces disculpas.

Antes pensaba que el mundo era mejorable.
Ahora pienso que yo soy mejorable.

Antes pasaba más tiempo educando a mis hijos.
Ahora procuro pasar más tiempo cultivando nuestra amistad.

Antes, cuando se estropeaba algo en casa, quería que fuese arreglado rápidamente.
Ahora, la mayoría de las cosas, si no son imprescindibles, esperan ahí: su momento oportuno.