Descubre tu vida, reconoce lo que llega a ella, deja pasar solamente aquello que sume

A LA VIDA SOLO PUEDO DECIRLE... GRACIAS 

“Cuando bebas agua, recuerda la fuente” 

Hoy no nos vamos a dedicar a pedir, no vamos a hacer referencia a nuestras penas, a nuestros pesares, rupturas, separaciones o tristeza alguna, porque es precisamente todo esto lo que no nos permite sentir en plenitud “nuestra vida”

Sencillamente parémonos a reflexionar sobre tantas cosas maravillosas que tenemos para dar gracias a la vida, por el canto de un pájaro, por la lluvia que refresca, por el amor de un hijo, por la tranquilidad del silencio, por el sol infinito, por quien llega y quien se va...

Recuerden la sabiduría del refranero “de bien nacido es ser agradecido”

No hace falta que tengas grandes posesiones, que seas una persona famosa, que estés muy bien acomodado a nivel social o que sencillamente no tengas ninguna preocupación, sabemos que esto es prácticamente imposible y más aún, poderlas tener todas juntas, cada persona independientemente de cuál sea su estatus en la vida, siempre tiene algún motivo que le genera preocupación, nunca tenemos las soluciones a todas las situaciones ni siquiera por que tengamos todo el dinero o toda la tranquilidad que creamos poder tener.

El valor que se da a las cosas está en función del esfuerzo, que se hace para conseguirlas y de la utilidad que se deriva de ellas

Así que ante la adversidad siempre es mejor mantener la entereza, mantener nuestra fortaleza propia de seres humanos y saber que brillamos con luz propia, siempre tenemos algo que agradecer, cada amanecer, cada respiración que hacemos, cada mañana, cada ser amado que forma parte de nuestra vida, cada persona que nos deja una enseñanza, cada pareja que pasa por nuestro lado, nuestros hijos, nuestros jefes, nuestros compañeros de trabajo, debemos agradecer cada instante poderoso de nuestra existencia, aún y cuando en la mayoría de los casos no entendamos por que suceden las cosas, seguramente al pasar del tiempo lo comprenderemos y podremos reconocer donde está la gratitud.

Y es que no existe un momento preciso y específico para dar las gracias, debemos agradecer cada día con tan sólo abrir los ojos, por el hecho de que jamás se nos negó el derecho de existir, porque estamos aquí y tenemos la oportunidad de experimentar la vida, de ser cocreadores de todo lo que existe en este planeta y tenemos la oportunidad de aprender tras cada experiencia vivida.

Convierte tener cada día este momento y convertirlo en tu momento de gratitud, por lo que te rodea, por quienes te rodean, si ocurre para bien o para sea como fuere, extrae lo bueno de lo malo que te suceda y de lo malo quédate con la menor cantidad que puedas, agradece el existir y el tener la oportunidad y la libertad de amar, agradece a quienes no están y a quienes llegan, cada mañana, cada suspiro que llega a tu vida, cada instante tenemos razones para agradecer, solo basta con prestarnos atención y observar lo que dice la naturaleza, la energía que nos toca y nos envuelve.

Descubre tu vida, reconoce lo que llega a ella, sólo tú tienes la potestad de permitir que esto o aquello te invada, deja pasar solamente aquello que sume, aprende a decir que no a todo aquello que daña tu espacio, recibe la armonía y la gratitud en tu vida, ahora es tu momento… Gracias por existir.

DOS REFLEXIONES FINALES

“Una buena forma de saber si uno está en el camino evolutivo, es darse cuenta que ya estamos triunfando en nuestros fracasos”.

“La vida está llena de oportunidades para ser feliz tan sólo es cuestión de no ponerle trabas a esa inclinación natural”.

http://lacienciadelespiritu.blogspot.com/2021/06/a-dia-de-hoy-la-vida-solo-puedo-decirle.html