EL MEJOR PLAN
Con frecuencia condicionamos nuestra felicidad al
cumplimiento de ciertos objetivos, elaboramos planes que nos permitan alcanzar
esas metas y luego hacemos nuestro mayor esfuerzo por llevarlos a la práctica.
Pero esa manera de programar nuestras vidas no nos asegura
que nuestros sueños se hagan realidad… y tampoco garantiza que vayamos a
sentirnos bien en el día a día, ni aún en el caso de que finalmente se cumplan
nuestros deseos.
» Si quieres hacer sonreír a Dios, cuéntale tus
planes.»
Lucille IV» y el hombre cohete, de Greg Hettinger (cortometraje)
Al singular protagonista de este video las cosas no le salieron como tenía pensado, aunque aparentemente había considerado todos los detalles. Incluso este no era su primer intento: esas gigantescas turbinas llevaban por nombre «Lucille IV», dando a entender que se trataba de su cuarto prototipo. (Me gusta mucho este video! Me encanta ese increíble personaje y su entorno, y me hace reír mucho el final tan inesperado… me alegro de haber encontrado la manera de relacionarlo con este tema para poder compartirlo aquí.)
Claro que es necesario hacer planes y es bueno tratar de
ajustarse a ellos. Pero no hay que olvidar que al mismo tiempo también
ejercemos un milagroso poder creador a través de la Ley de Atracción, y podemos
alterar la realidad e influir sobre las otras personas si actuamos de manera
consciente en el momento presente. Lo mejor, entonces, es que nuestros planes
contemplen la posibilidad de aprovechar las oportunidades que vayan surgiendo
aunque no las hayamos previsto.
Los buenos jugadores de ajedrez pueden imaginar el
desarrollo de una partida con muchas movidas de anticipación. A este aspecto
del juego se lo llama «ajedrez táctico» y permite prever y llevar a cabo una
elaborada secuencia de movimientos para obtener alguna ventaja o incluso para
ganar la partida. Podríamos decir que estos jugadores saben elaborar un buen
plan y llevarlo a la práctica.
Pero los grandes jugadores aplican también el «ajedrez
posicional», que consiste en tratar de ubicar las piezas propias dominando las
casillas más importantes del tablero y simplemente dejarlas allí, aunque no se
tenga aún una táctica concreta en mente. Tener bien posicionadas nuestras
piezas nos asegura poder responder de la manera más efectiva ante cualquier
circunstancia inesperada en el desarrollo del juego.
Del mismo modo, mientras tratamos de llevar a cabo aquellas
tácticas o planes que nos permitan alcanzar nuestras metas, lo mejor que
podemos hacer es posicionarnos frente a la realidad de una manera tal que
podamos interactuar y relacionarnos de manera creativa y espontánea,
aprovechando cualquier oportunidad inesperada que se nos presente.
7 tips para recuperar
el momento presente
Para ejercer al máximo nuestro poder creativo, para generar
y aprovechar nuevas ideas y oportunidades, debemos experimentar plenamente el
«aquí y ahora», debemos vivir cada instante de manera consciente. Y, tal vez lo
más importante, debemos responder al momento presente con emociones positivas,
apreciando todo lo bueno que nos ofrece.
Aquí 7 ideas sencillas para recuperar la consciencia si
descubrimos que estamos distraídos o preocupados.
- Sentirse
bien
En todo momento en que nos sintamos incómodos, apurados,
enojados, etc., siempre podemos relajarnos por un momento, tomar distancia de
lo que nos molesta, sonreír, y sentirnos aunque sea un poco mejor de lo que
estábamos unos segundos antes.
- Respirar
profundamente
Cuando estamos distraídos, actuando de manera mecánica,
nuestra respiración es inconsciente y superficial. Respirar profundamente dos o
tres veces es muy relajante y nos conecta nuevamente con el momento presente.
- Apreciar
y agradecer
En cualquier momento y lugar siempre podemos dedicar unos
momentos a apreciar lo bueno que el momento presente nos ofrece. Siempre hay
cosas buenas por las que expresar gratitud, por ejemplo la salud, el clima, la
compañía, el sol, la ropa que llevamos puesta, etc. La actitud de apreciar va
de la mano de la de agradecer. Y la gratitud atraerá más cosas por las que
sentirse agradecido.
- Actuar
conscientemente
Podemos llevar a cabo cualquier actividad de una manera
consciente y deliberada, experimentando plenamente nuestras sensaciones
corporales y nuestros movimientos. Caminar, por ejemplo, es una experiencia
totalmente diferente si se hace de manera consciente. Además, experimentar
plenamente lo que estamos haciendo interrumpe el desgastante diálogo interno de
nuestra mente, que de otra manera no se detiene nunca.
- Moverse
lentamente
Continuar haciendo lo que estemos haciendo pero moviéndonos
un poco más despacio nos devuelve la consciencia de nuestros movimientos y
suspende el interminable flujo de los pensamientos.
- Quererse
y cuidarse
Dirigir nuestra apreciación y gratitud hacia nosotros
mismos, a cada una de nuestras cualidades y talentos, es decir amarnos a nosotros
mismos, ejerce un poderoso poder transformador sobre nosotros, sobre nuestras
relaciones y sobre toda nuestra realidad.
- Meditar
Practicar alguna técnica de meditación nos devuelve la conexión con el momento presente y suspende ese incesante diálogo interno que ocupa siempre nuestra atención. A continuación un video que propone y describe una técnica de meditación muy sencilla, muy breve y que podemos practicar casi en cualquier situación:
Cómo meditar en un minuto, de Martin Boroson.
Jesús nos dejó un claro mensaje acerca de planes y
preocupaciones, un verdadero llamado a enfocarnos en el presente:
Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros, y sin embargo, vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No sois vosotros de mucho más valor que ellas? ¿Y quién de vosotros, por ansioso que esté, puede añadir una hora al curso de su vida? Y por la ropa, ¿por qué os preocupáis? Observad cómo crecen los lirios del campo; no trabajan, ni hilan; pero os digo que ni Salomón en toda su gloria se vistió como uno de éstos. Y si Dios viste así la hierba del campo, ¿no hará mucho más por vosotros, hombres de poca fe? Por tanto, no os preocupéis, diciendo: «¿Qué comeremos?» o «¿qué beberemos?» o «¿con qué nos vestiremos?» Porque los gentiles buscan ansiosamente todas estas cosas; que vuestro Padre celestial sabe que necesitáis todas estas cosas. Pero buscad primero su reino y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. Por tanto, no os preocupéis por el día de mañana; porque el día de mañana se cuidará de sí mismo. Bástele a cada día sus propios problemas. Mateo 6:26-34
Es en el momento presente en el que sembramos la semilla de
lo que vendrá. Creamos nuestra realidad de acuerdo a nuestras emociones, por
eso es tan importante cuidar nuestros estados de ánimo y dirigir
conscientemente nuestra atención hacia los aspectos positivos de la realidad,
para permitir que la vida pueda colmarnos de bendiciones. Probablemente ese sea
el mejor plan que podamos adoptar.
Por Axel Piskulic
No hay comentarios:
Publicar un comentario