CUANDO PERDER… ES GANAR
Lo
 que ya sabemos no necesitamos removerlo. Pero es necesario aprender
 que a lo largo de nuestra vida… a veces uno cuando pierde, gana.
 Gana tranquilidad, serenidad y
 verdad. Gana silencios creativos, momentos sin amarguras y, sobre
 todo, se gana uno a sí mismo.
 Teniendo en cuenta que, en
 numerosas ocasiones en la vida, cuando nos toca perder, lo más
 importante es no perder más de lo necesario. 
 Estamos apegados a los afectos, nos
 duele el aire que respira quien queremos si le hace daño y, cuando
 el cariño es real, luchamos hasta el infinito por lo que amamos.
 Sin embargo, la vida nos trae confusiones, luces que brillan sin
 brillo pero que nos han deslumbrado, mentiras viejas de las que
 hacemos dolores nuevos y alguna que otra creencia impuesta que nos
 impide ser libres.
 Cuando el cariño es auténtico no
 valen los engaños. Y no valen porque si fuésemos nosotros los que
 los llevásemos a cabo, se nos partiría el corazón y la cara se
 nos caería de vergüenza.
 A veces, nos enamoramos de la idea
 que la persona deja en nuestro cerebro de lo que es y de cómo es y
 sin comprobar la realidad, los sentimientos cabalgan alocados por lo
 que creemos cierto, y nos fundimos con quien sentimos tan amoroso.
La
 vida gira en torno a muchas circunstancias que solo hacen que
 reafirmemos más nuestra personalidad básica… pero uno es lo que
 es.
 No podemos forzar nada porque
 termina dañándonos la situación. Lo peor es permanecer mucho
 tiempo en una misma orilla cuando comprobamos que solamente hay
 arenas movedizas bajo los pies.
Nada
 pasa en vano. Nada es casual todo es “causal”, todo sucede por
 algo.
 Debemos adquirir el conocimiento
 necesario para saber porque experimentamos una experiencia y no otra
 y luego solamente nos queda agradecer lo bueno y de lo no tan bueno
 extraer la enseñanza.
Y
 seguramente, algún día seamos el mejor recuerdo que le sucedió a
 alguien. Lo mejor de su vida. Y de esa forma nos convertiremos en lo
 mejor de lo mejor. 
 
No hay comentarios:
Publicar un comentario