11.3.20

Se trata de respirar y nutrirse del aliento que lleva a la eternidad a cada momento


LA ETERNIDAD EN EL MOMENTO

De los altares paganos a los divinos senderos
pensamientos mensajeros van llegando de la mano.
Se confunden en el viento desmadejando en la aurora
esos recuerdos que añoran desbaratar el silencio.

De los ayeres perdidos a los futuros brumosos
no ha de llegar nunca el gozo, si del presente en que vivo
que es eterno en cada instante cuando voy al corazón
que es la única razón que hace que me levante.


Y se trata de respirar y nutrirse del aliento
que lleva a la eternidad, que lleva a la eternidad,
que lleva a la eternidad a cada momento.

Desde la cabaña humilde hasta el pomposo palacio
son solo vacíos espacios si el corazón no los vive.
No es más ducho el que persigue que el que encuentra sin buscar
la verdad con que alimenta y al espíritu hace libre.

Y se trata de respirar y nutrirse del aliento
que lleva a la eternidad, que lleva a la eternidad,
que lleva a la eternidad a cada momento.


A.BARO



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