¿DÓNDE ESTÁN LAS
RESPUESTAS?
Hay momentos en la vida que no tienen respuesta ni
explicación; sucesos, acontecimientos, experiencias vividas, tantas cosas que
no sabemos por qué suceden, por qué las debemos vivir, ni la enseñanza que nos
aportan.
Por eso debemos tener siempre presente, que la casualidad no
existe y que casi nada de lo que nos acontece en la vida es fruto del azar,
otra cosa es que desconozcamos a nivel consciente las causas profundas que
determinaron en el tiempo y en el espacio que vivenciáramos una experiencia u
otra.
Muchas veces nos quedamos estancados buscando las respuestas
y no avanzamos, porque nos da miedo continuar en medio de la incertidumbre
que nos produce el no entender y no aceptar esas cosas que nos han de pasar.
Debemos tener en cuenta que hay respuestas que tardamos años
en entenderlas, no hay un patrón de tiempo, para la comprensión de las
respuestas que vamos obteniendo en la vida.
Amores que llegan y se van sin avisar, heridas, vacíos,
enfermedades, caídas, pérdidas, caminos que se abren, puertas que se cierran,
circunstancias que afrontar, decisiones que tomar.
Todo ello invade nuestra mente, llenándola de preguntas
inciertas que no encuentran respuestas, nos llenan de angustia, atentan contra
nuestra fe, se convierten en la piedra en el zapato que no nos deja seguir.
Muchas de estas preguntas se convierten en cadenas que nos
han de esclavizar, nos aferramos a ellas, y aunque quizás respondamos algunas,
formulamos otras, porque nos hace falta buscar excusas que nos torturen y nos
hagan dudar, fabricando temores que nos arrebatan la paz.
No busquemos respuestas que quizás no llegarán, hay cosas
que suceden, aunque no entendamos el porqué y sintamos que no tenemos las
suficientes fuerzas de asumirlas y continuar.
No hay más opciones que vivir, seguir, creer, no perder la
esperanza de que vendrán tiempos mejores que compensarán las luchas que hemos
asumido valientemente, sin renegar por todo, sin rendirnos, sin renunciar.
Recuerda siempre que el elemento más importante en la
búsqueda de respuestas es la “intuición” ya que la intuición es un sentido
espiritual que se abre hacia dentro y tiene la facultad de conocer la verdad,
con independencia de todo origen externo de la información.
Por eso, más que buscar respuestas, démoslas nosotros mismos
con nuestro trabajo y esfuerzo con nuestro vivir y actuar en el día a día, en
lo más sencillo y pequeño, aún en todo aquello que no entendemos y que a veces
nos hace dudar.
Y como reflexión final decirte que la gran mayoría de veces
que no obtenemos respuestas es simplemente, que formulamos mal la
pregunta….porque:
“La proyección es la base de la percepción, el mundo que ves
es lo que tú has puesto en él y nada más… es el testimonio de tu estado mental,
la imagen exterior de tu estado interior, tal como piensas así percibes”.
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